Axa Matute

     En el común de los hablantes le llamamos lenguaje no verbal; cada parte de nuestro cuerpo tiene el poder de expresarse de forma tal que las personas que te ven y saben interpretar, son capaces de deducir lo que estás comunicando, incluso pueden desnudar tu personalidad.

     Comprender nuestro lenguaje corporal y lo que estamos comunicando es esencial para conectarnos con los demás. Aquellos que usan el lenguaje corporal para influenciar a los otros saben cómo hablar en público con gestos que provocan un mayor impacto en sus oyentes. Estos son algunos elementos del lenguaje corporal que debes cuidar:

  • Contacto visual: Aunque algunas personas inseguras piensen que esto es algo intrusivo, en general funciona para despertar sentimientos de respeto, afecto y hasta para dar la impresión de ser un pensador abstracto e inteligente. 

  • Postura: La postura es otra parte de tu lenguaje corporal que puede hacer que te veas como un gran ganador sin importar donde vayas. Cuando te paras con confianza con tus hombros hacia atrás y tu cabeza arriba con una sonrisa cálida te ves como alguien refinado, exitoso y orgulloso. Estira tu cuerpo hasta alinearse perfectamente: conserva tu cabeza arriba, haz tus hombros para atrás, mantén tu pecho abierto y tu espalda recta como si fueras muy alto. Si relajas los hombros en esta posición, darás la impresión de estar relajado y tener confianza.

  • Higiene y vestimenta: Aunque tengas una gran sonrisa, contacto visual y buena postura, no servirá si no tienes una buena higiene y estás vestido para el éxito. Esto puede sonar muy obvio o mundano, pero puede hacer toda la diferencia al querer causar una buena impresión. Si quieres que te tomen con seriedad, cepilla y lava tu cabello y mírate en el espejo antes de salir. Revisa tus dientes, orejas, nariz y cara. Busca manchas en el cuello de tu camisa y en las mangas. Mastica las mentas antes de las juntas y utiliza desodorante. Asimismo, elige un vestuario que sea bueno para la ocasión y asegúrate de que esté limpio.

Dominar estas técnicas te dará una ventaja competitiva como gerente o empleado. Tu habilidad para ajustar tu lenguaje corporal para comunicar diferentes sentimientos en diversas situaciones denotará tu habilidad para adaptarte. Te puede ayudar a impresionar a inversionistas, inspirar a un equipo, tener aliados, atraer a seguidores y prospectos de contratación. También puede mejorar tu éxito