Desde la televisión o la radio, el comentarista o narrador forma opinión y entretiene a una variada y exigente audiencia, sedienta de pasión deportiva. Como todo, esto requiere una preparación ardua y un estudio para estar actualizado sobre los jugadores. Muchos pensarán que se trata de sentarse a describir lo que se está viendo, pero hay un profundo trabajo detrás, que se remonta a semanas antes de narrar el partido en sí.

1)Un buen comentarista deportivo conecta con su público: 

Busca aquello relevante y diferente. Además, adopta un estilo periodístico propio, sin ser parcial o utilizar lenguaje vulgar o estereotipos.

2)Tu objetivo debe ser emocionar: 

Piensa que los eventos deportivos suelen estar cargados de emociones, aprovéchalas para empatizar con la audiencia. Transmite información y emociones, de manera que el público sienta que está ahí contigo.

3)No olvides que debes ser profesional: 

No sacrifiques el buen hacer periodístico para conseguir más audiencia. Sé emotivo, pero también, riguroso e imparcial. Crea entrevistas con preguntas inteligentes, redacta artículos y noticias de interés sin recurrir a artificios o temas fáciles y vacíos.

4)Practica y observa a los profesionales:

Nadie nace con los conocimientos y esto no es la excepción. La práctica ardua, observación de personajes ya consagrados en el medio será la mejor forma de aprender y lograr tu  propio estilo.

5)Experiencia:

Trabajar en un medio de comunicación te proporcionará conocimientos reales de la profesión, el ritmo de trabajo y contacto con los profesionales del sector. Además, tendrás la oportunidad de acudir a pequeños eventos deportivos y tener tus primeras experiencias como comentarista deportivo.

6) Crea un podcast o blog: 

Estamos en la era de Internet y puedes hacerte notar fácilmente a través de métodos menos tradicionales. Si tienes tiempo y motivación, trata de complementar estas experiencias en tu propio espectáculo deportivo.

En el mundo existen comunicadores y profesionales que se entregan con profundo e imparcial entusiasmo a sus transmisiones y a su público, pero para llegar a ese nivel,  viven días y noches de intenso trabajo. Por eso te exhortamos a que no flaquees si estás en ese camino o si vas a empezar. Queremos que tengas ánimos porque la narración deportiva es un mundo increíble donde puedes pasar a la historia por un relato emotivo o ser fuente de inspiración para las próximas generaciones.